¿QUÉ CULPA TIENE FATMAGUL?

La telenovela turca Fatmagul ha acaparado la atención de los televidentes puertorriqueños no tan solo ocupando los primeros lugares de sintonía si no provocando algo probablemente nunca antes visto en la TV boricua y es que se esté transmitiendo simultáneamente en dos emisoras competidoras.  El éxito de esta teleserie protagonizada por la actriz turca Beren Saat ha suscitado infinidad de reacciones entre los televidentes de la isla del encanto.  Por un lado están los fanáticos de la telenovela que disfrutan de cada segundo del melodrama y por otro lado están los que «odian» el proyecto porque «es una porquería de afuera».  Fatmagul está basada en una novela literaria y se había realizado una versión cinematográfica antes de la versión televisiva.  Este proyecto se ha presentado en más de 42 paises con gran éxito.  Dada «la fiebre» de Fatmagul y los comentarios de los que la llaman «una porquería», saqué un rato para ver la famosa telenovela y formar mi propia opinión.  Inmediatamente se puede percibir que esta teleserie tiene valores de producción, buenas actuaciones, paisajes impresionantes, buena dirección de cámaras, personajes interesantes y una premisa bastante pertinente como lo es la violencia contra la mujer.  Cualquiera que sepa apreciar lo que es un proyecto televisivo bien realizado entiende que Fatmagul no «es una porquería», pero a la vez no está tan lejos de la verdad que ocupa el espacio que podría ocupar una producción puertorriqueña.  Probablemente no haya un puertorriqueño que desee con más fuerza que yo, el que hayan producciones boricuas constantemente en la televisión local, pero cuando veo una producción de calidad que se presenta en la televisión de la isla es justo que se reconozca como una buena producción y no que se menosprecie el proyecto por ser un proyecto extranjero.  Si eso fuera asi en el resto del mundo, proyectos puertorriqueños como El Hijo de Ángela Maria, Cristina Bazán, Coralito y Tanairí no hubiesen tenido la posibilidad de haberse convertido en éxitos internacionales como lo fueron.  De que en nuestra isla existe la capacidad y el talento para hacer producciones de calidad que puedan ser exitosas tanto en la isla como en el exterior no queda duda.  La mas reciente premiación de los «Suncoast Emmy Awards» fue prueba de que en Puerto Rico se puede producir programación televisiva de calidad, ya que proyectos boricuas fueron galardonados con 15 premios Emmy.  A esto se añaden proyectos como  Incógnita y Papi en Casa, los cuales contaban con buenos guiones, actores talentosos y buena producción desde la perspectiva de los presupuestos de nuestro país.  Es importante que los televidentes boricuas apoyen la producción televisiva local, pero hay que apoyar la producción local de calidad.  El hecho de que una producción sea extranjera no debe ser el motivo para que esta no sea apoyada, como el hecho de que una producción sea puertorriqueña tampoco debe ser la razón por la que cuente con el favor de los televidentes.  Es lamentable ver como de los proyectos de nuestra isla premiados internacionalmente pocos cuentan con un apoyo masivo en Puerto Rico.  La televisión es un negocio y en el mercado actual de esta industria es importante que los proyectos que se realizan en la isla tenga la capacidad de poder ser vendidos en el exterior para que sean económicamente rentables para los canales de televisión que los producen.  ¿Es posible lograr distribución internacional de proyectos puertorriqueños con pésimos libretos, improvisados y descuidados en producción y contenidos?  Definitivamente no.  No podemos tapar el cielo con un dedo; aunque nuestra isla está llena de profesionales excelentes en la industria de la TV, también es cierto que los principales canales televisivos tienen algunos programas de comedia vulgares, con mal llamados comediantes y seudo libretistas que están ocupando los espacios de los escritores, actores, directores y productores preparados y con verdadero talento.  Antes de tratar de decir que Fatmagul es una porquería como argumento para defender programas locales que nada aportan a la industria ni a una mejor sociedad, mejor debemos apoyar aquellos programas locales de calidad para que los canales de televisión que dan espacio a aquellos que producen  verdaderas «porquerías» se vean en la obligación de elevar la calidad de su programación porque estaría probado en las encuestas que los programas de calidad cuentan con el apoyo del público.  Este es el momento de que mostremos la falsedad del argumento de «eso le damos porque eso es lo que le gusta al público». Eso le dan porque eso les cuesta más barato y exige menor esfuerzo.  Necesitamos una mejor calidad de televisión boricua y tenemos la capacidad y el talento para hacerlo.  Basta ya de culpar del todo a la producción extranjera si no apoyamos los proyectos de la isla que son de calidad y defendemos los que son chatarra televisiva.  Ahora los dejo con la pregunta; ¿Qué culpa tiene Fatmagul?Síguenos en twitter@abimaelacosta y en facebook @abimaelacostawriter